Intro

Aserradero

Aserradero

Del tronco a la barrica

Somos la primera empresa tonelera española que realiza íntegramente en el interior de sus instalaciones la manipulación completa de la madera. Desde la selección en origen de la madera hasta la construcción de la barrica habrán pasado al menos dos años y en todo momento ejercemos un control total sobre el proceso.

Una vez en nuestras instalaciones los troncos se sierran siguiendo su propia estructura interna de crecimiento. Para ello se utiliza un sistema de guiado láser por ambas caras del tronco que garantiza la uniformidad del corte para el roble americano y el sistema de hendido para el roble francés.

Las piezas resultantes son las duelas, con las que se fabricarán completamente a mano las barricas tras su período de secado. Con las piezas no aprovechables para duelas o fondos y con el mismo tiempo de secado producimos alternativos.

Secado

El carácter del vino

Las duelas permanecen a la intemperie durante al menos 18 meses las de roble americano y 24 las de roble francés. Durante este tiempo se someten a un curado y secado natural íntegramente al aire libre, lo que no es una cuestión superficial.

En su estado natural, la madera de roble aportaría al vino un toque amargo y astringente. La manera de conseguir una mayor ‘amabilidad’ del roble es someterlo durante un largo periodo de tiempo a las inclemencias meteorológicas (viento, lluvia, bajas temperaturas, la acción del sol).

Los componentes químicos causantes de su aspereza natural se van suavizando y al final aportan al vino mayor finura y nobleza durante la crianza.